Errores frecuentes que cometemos en el gallinero durante el invierno
Toma nota de lo que no debes hacer:
1-Cerrar a cal y canto el gallinero
Con el fin de evitar que nuestros animales pasen frío y que no haya ni una sola corriente de aire, muchos criadores noveles lo primero que hacen es cerrar todas las aberturas del gallinero. Esta práctica está muy extendida y, como otras muchas es consecuencia de seguir malos consejos, los gallineros necesitan estar ventilados. Si cerramos las aberturas, lo único que vamos a conseguir es que la humedad se dispare dentro del gallinero, provocando una fermentación continua con graves consecuencias. El aire que van a respirar nuestros animales estará totalmente viciado, predominando gases nocivos como el amoniaco.
2- Descuidar la limpieza
La limpieza siempre es importante, pero en época de frío y lluvias lo es aún más. El exceso de humedad dentro del gallinero, como comentábamos en el párrafo anterior, puede traer nefastas consecuencias para nuestros animales. Recomendamos después de cada limpieza poner una cama seca de viruta, por ejemplo, con el fin de mantener el suelo donde pisan las aves lo más seco posible.
3-No dejar salir a los animales del gallinero
Las gallinas necesitan salir diariamente, pues tienen sus rutinas y no debemos cambiarlas. Necesitan escarbar, buscar insectos, tomar el frágil sol de invierno, etc. Impedirles que realicen sus rutinas diarias puede provocarles estrés y, como no nos cansamos de repetir, el estrés en las gallinas es la causa de la mayoría de las enfermedades.
4-Descuidar la alimentación
Podríamos decir en este punto que un pequeño plus de alimentos ricos en energía es bueno para el frío, pero realmente este tipo de consejos hay que darlos con mucho cuidado. Recomendamos mantener el equilibrio en la alimentación, ya que un plus rico en materias grasas puede traer consecuencias indeseadas en materia de sanidad. En invierno, los animales necesitan más calorías para combatir el frío, y en días de lluvia, por ejemplo, salen menos horas a buscar alimentos por el corral o jardín; por tanto, en invierno no debe faltarles una buena alimentación en su comedero dentro del gallinero.
5- Olvidarse de verificar que el agua del bebedero no se ha helado
Las aves necesitan hidratarse continuamente, por tanto, deben tener agua a su disposición de forma permanente. En épocas de mucho frío, es recomendable cambiar el agua varias veces al día o bien utilizar calentadores de bebederos para evitar que el agua se hiele.
6-Calentar el gallinero en exceso
Una temperatura excesiva fragiliza nuestras gallinas y como consecuencia de ello las hace más proclives a contraer enfermedades. Únicamente es recomendable una fuente de calor si el frío es extremo y la utilizamos simplemente para subir aquellos grados que estén muy por debajo de lo normal. Evitar corrientes de aire directas, en la mayoría de los casos, es suficiente para mantener el confort en el gallinero.
Y, por último, aconsejamos reforzar las defensas naturales de las aves para que resistan las bajas temperaturas y que no se constipen. Productos como SoluRespi, SoluFío o SoluStress pueden ayudarte en esta labor.