¿De dónde viene esa agresividad propia de los gallos? ¿Qué significa? ¿Cómo limitar los conflictos? Aquí están nuestras respuestas:
Una organización social jerarquizada en el gallinero
Con los gallos existe una organización social jerarquizada semejante a la de las gallinas, es decir, lineal, con un gallo dominante y gallos dominados. Así, el dominante reina sobre todo el corral, incluso las gallinas.
Las batallas entre gallos son mucho más violentas que entre gallinas, a causa de sus espolones y de la testosterona, la hormona del macho que les hace más agresivos. Dichas batallas pueden conducir hasta la muerte cuando ninguno quiere someterse, si bien esto suele ser raro en el gallinero, ya que la mayoría de las agresiones finaliza con el sometimiento de un macho a otro.
Afinidad de color entre gallos
Los gallos se pelean generalmente con un animal de color parecido al suyo, aunque el tamaño sea completamente diferente. Se supone que se trata de un instinto o fenómeno de identidad que procede del estado salvaje, donde el color determina al enemigo de una misma especie contra el cual hay que defender absolutamente el territorio y sus riquezas.
La posesión de hembras en el gallinero
La posesión de hembras puede explicar también la violencia de los combates de gallos en el corral. El gallo dominante es efectivamente el que se aparea prioritariamente. Pero, aunque se acerque más a las gallinas de su harén, y tenga por lo tanto más descendientes, los gallos dominados afinan estrategias para reproducirse discretamente al margen del «soberano». Varios estudios científicos han encontrado incluso que su esperma es más eficaz, y eso es debido a una mayor movilidad de sus espermatozoides.
La jerarquía es un instinto animal y nosotros no podemos hacer mucho por evitarlo. Lo ideal es introducir varios gallos juntos al mismo tiempo, o si no prever antes de su entrada dos voladeros y dos gallineros separados. También hay que tener mucho espacio y muchas hembras para que la cohabitación se lleve bien.